CARACTERÍSTICAS
GENERALES DEL REINO ANIMAL
Animal, cualquier miembro del
reino animal. Este reino comprende todos los organismos multicelulares
que obtienen energía mediante la digestión de alimentos, y contienen células
que se organizan en tejidos. a diferencia de las plantas, que producen
nutrientes a partir de sustancias inorgánicas mediante fotosíntesis, o de los
hongos, que absorben la materia orgánica en la que habitualmente se hallan
inmersos, los animales consiguen su comida de forma activa y la digieren en su
medio interno. Asociadas a este modo de nutrición existen otras muchas
características que distinguen a la mayoría de los animales de otras formas de
vida. Los tejidos especializados les permiten desplazarse en busca de alimento
o, si permanecen fijos en un lugar determinado casi toda su vida (animales
sésiles), atraerlo hacia sí. La mayoría de los animales han desarrollado un
sistema nervioso muy evolucionado y unos órganos sensoriales complejos que,
junto con los movimientos especializados, les permiten controlar el medio y
responder con rapidez y flexibilidad a estímulos cambiantes.
Al contrario que las plantas,
casi todas las especies animales tienen un crecimiento limitado, y al llegar a
la edad adulta alcanzan una forma y tamaño característicos bien definidos. La
reproducción es predominantemente sexual, y en ella el embrión atraviesa una
fase de blástula (véase embriología).
Al principio, debido a
las grandes diferencias que existen entre plantas y animales, se estableció una
división de todos los seres vivos en dos reinos,
vegetal y animal. Cuando más tarde se
investigó el mundo de los microorganismos se observó que algunos eran
claramente del tipo vegetal, con células con pared celular y cloroplastos para
realizar la fotosíntesis, mientras que otros se parecían a los animales porque
se desplazaban (mediante flagelos o pseudópodos) y digerían alimentos. Este
último tipo, los protozoos, se clasificó como un subreino del reino animal.
Sin embargo, surgieron dificultades ante muchas formas que presentaban
características mixtas, y con grupos en los cuales algunos organismos eran
similares a las plantas pero estaban emparentados con animales del tipo de
flagelados. Finalmente, se propuso un modelo de clasificación con varios reinos
en el que la definición de vegetal y animal era más restringida. Lo que se
entiende por animal depende, pues, del modelo que se adopte.
Esta enciclopedia utiliza
el sistema de clasificación en cincos reinos
en el que los animales se reducen a
aquellos organismos con tejidos diferenciados, y los grupos de protozoos se
asignan al reino protistas. Sin embargo, la separación de los protozoos de los
animales superiores no es totalmente satisfactoria debido a que los sistemas de
clasificación suelen reflejar las relaciones evolutivas, y se cree que los
organismos multicelulares descienden en más de una ocasión de los protozoos.
Además, algunos de estos últimos forman colonias difíciles de distinguir de
animales multicelulares simples. El problema que existe para establecer los
límites del reino animal es reflejo de la propia naturaleza,
donde las fronteras son difusas y la evolución deja grupos intermedios en su
avance hacia los grupos principales.
ORÍGENES Y RELACIONES
Como se indica, es evidente
que los animales multicelulares (metazoos) proceden de formas unicelulares de
tipo animal (protozoos). La relación exacta no está clara debido a la escasez
de fósiles disponibles y a la extinción de formas intermedias, aunque es
posible que existan varias líneas evolutivas. Por ejemplo, ciertos flagelados
de tipo animal forman colonias y es probable que puedan haber evolucionado
hacia organismos más diferenciados. Además, los estadios embrionarios de
algunos animales muestran una secuencia de cambios que proporcionan un modelo
evolutivo razonable: un estadio unicelular, seguido de un estadio del tipo de
colonia indiferenciada, una esfera de células hueca (blástula), y después un
tubo (estadio de gástrula). Otras teorías sugieren la existencia de formas
intermedias distintas, como un protozoo con varios núcleos celulares.
Desde sus inciertos orígenes,
el reino animal
se ha diversificado en varios linajes o ramas, que a su vez se han subdividido
en filos, clases y grupos menores. Desde hace tiempo, se rechaza el antiguo
concepto de que grupos de organismos han progresado desde formas inferiores a
otras superiores, en lo que se denomina cadena vital. El curso de la evolución
es más comparable a un árbol o a un arbusto con muchas ramas que sufre una
diversificación adaptativa (véase adaptación), con un cierto grado de
evolución progresiva en todo el reino. Por tanto, aunque los insectos,
cefalópodos y vertebrados siguieron diferentes líneas evolutivas, todos se
pueden describir como animales superiores.
Ya en las rocas más antiguas
del cámbrico aparece una extensa variedad de fósiles que representan a los
grupos principales de animales (filos), por lo que probablemente, gran parte de
la diversificación del reino se produjo antes del cámbrico, hace más de 570
millones de años. Debido a que el filo se originó en épocas remotas y hay pocos
fósiles, los parentescos se deducen según características perdurables, tales
como la embriología, y con frecuencia son hipotéticas. Por lo general, las
evidencias de que disponemos para establecer las subdivisiones dentro de cada
filo son más precisas, ya que muchas de ellas tienen un origen más reciente.
ESTRUCTURA ANATÓMICA
Los diversos tipos de
animales tienen estructuras anatómicas que se pueden interpretar tanto
histórica como funcionalmente. Además, la anatomía comparada permite a los
científicos clasificar a los animales en grupos principales, y establecer y
explicar su evolución.
INTESTINO
Una parte básica del cuerpo
es el intestino, cuya aparición en la evolución de los metazoos debió ser
temprana. Los animales más simples, las esponjas, tienen cavidades internas que
intervienen en la alimentación, pero los orificios de apertura no son
comparables a una boca o a un ano. Tienen además tejidos, aunque carecen de
órganos reales o nervios y de simetría bilateral. La medusa más compleja y sus
parientes, animales más activos que generalmente se alimentan utilizando sus
tentáculos, tienen un intestino con boca pero sin ano. El sistema nervioso está
presente, aunque sin cerebro o cabeza. El cuerpo de la medusa tampoco tiene
simetría bilateral, es decir, no hay un lado izquierdo o derecho, como ocurre
en el cuerpo de los animales más evolucionados, incluyendo a los seres humanos.
A pesar de ello, presentan una simetría radial, o simetría alrededor de un eje
central.
SIMETRÍA
La simetría proporciona
una base para dividir de nuevo a la mayoría de los animales en dos grupos:
radiados y bilaterales. Los tejidos de los primeros sólo tienen dos capas
principales, mientras que en los animales bilaterales existen tres. Este cambio
se produjo con la aparición de una capa intermedia (mesodermo) entre la externa
(ectodermo) y la interna (endodermo). Durante el desarrollo embrionario de los
animales, el ectodermo se diferencia en la piel y el sistema nervioso, el
endodermo en el revestimiento intestinal y algunos de sus derivados, y el
mesodermo en el resto de las estructuras, como los músculos. La simetría
bilateral es también un rasgo de evolución ligado a un aumento de la capacidad
de locomoción activa, aunque con frecuencia dicha movilidad se pierde en líneas
evolutivas posteriores. El movimiento en una dirección está facilitado por el
desarrollo de una cabeza, que contiene el cerebro y los órganos de los sentidos
en la parte delantera.
PROTOSTOMOS Y
DEUTEROSTOMOS
Entre los organismos con
simetría bilateral, hay un número de filos que difieren en sus formas adultas,
pero han podido relacionarse según sus etapas embrionarias tempranas. Estos
grupos se establecen en función de cómo se dividen las células y cómo se forman
los órganos. Por ejemplo, una de estas subdivisiones básicas separa los
organismos con simetría bilateral en los protóstomos, en los que persiste la
boca embrionaria, y en los deuteróstomos, en los que se forma una boca nueva.
(De ahora en adelante, hasta el apartado de deuteróstomos; los animales a los
que nos referiremos son protóstomos).
CELOMA
En los organismos primitivos
con simetría bilateral existía un intestino sin ninguna otra cavidad corporal.
Debido a la ausencia de dicha cavidad o celoma recibieron el nombre de
acelomados. También, carecían de ano y de aparato circulatorio, aunque
probablemente dispusieran de un aparato excretor simple. Entre los animales
actuales, este estadio está representado por los gusanos planos (filo
platelminto). La distribución de materiales en el organismo es ineficaz debido
a la ausencia de aparato circulatorio y ano. Los gusanos cintiformes (filo
nemertinos o rincocelos) tienen aparato circulatorio y ano, aunque la
locomoción es lenta y torpe.
La aparición de un celoma
junto al intestino representa un progreso importante en la evolución. Esta
cavidad añadida permite el alojamiento de los órganos internos. En algunos
animales, si además existe una presión sobre sus contenidos, adquiere las
funciones de aparato circulatorio y de esqueleto. Hay dos tipos básicos: el
celoma verdadero, que es una cavidad dentro del mesodermo revestida por una
capa de tejido denominada epitelio, y el pseudoceloma, que carece de dicho
revestimiento. Cierto número de filos, sobre todo de los animales de tipo
vermicular, presentan este último tipo de cavidad corporal, y de aquí que
reciban el nombre de pseudocelomados. En general, se caracterizan por presentar
un tamaño discreto y una locomoción precaria. Carecen de aparato circulatorio y
son simples en otros aspectos. No obstante, son muy abundantes en algunos
hábitats. El resto de los organismos tienen un celoma verdadero y se denominan
eucelomados.
FORMACIÓN DE CELOMA
El grupo eucelomados admite
una subdivisión (no absolutamente rigurosa) basada en cómo se forma el celoma
durante el desarrollo embrionario. Mientras que en los esquizocelos se produce
por división del mesodermo, en los enterocelos es consecuencia de un
crecimiento externo del intestino. Entre estos dos grupos existe un pequeño
grupo intermedio, los lofoforados o tentaculados. Sus miembros tienen una
corona de tentáculos, o lofóforo, que utilizan en la alimentación, y están
adaptados a un tipo de vida sedentaria.
Los esquizocelos verdaderos
están relacionados con los gusanos anélidos (filo anélido). En este grupo
aparece el metamerismo, o segmentación (repetición seriada de grupos de partes
del cuerpo), un tipo de organización que favorece la locomoción. Los artrópodos
(filo artrópodo) conservan esta segmentación a la que se añade un esqueleto externo
duro (exoesqueleto) que mejora la locomoción y proporciona apoyo y protección.
Los moluscos (filo moluscos) tienen cavidades celómicas pequeñas y un ligero
vestigio de segmentación, con una concha típica y un cuerpo blando.
DEUTEROSTOMOS
Los deuteróstomos comprenden
a los enterocelos: equinodermos, saetas, hemicordados, y cordados, es decir, el
resto del reino animal. Estos grupos que constituyen filos se relacionan en
función de sus características embrionarias, y pueden vincularse al grupo de
los lofoforados, algunos de los cuales forman también el celoma, como los
enterocelos. Además no existe segmentación del tipo de la que aparece en el
filo anélido. Otro lazo de unión de los deuteróstomos con los lofoforados es la
presencia en algunos miembros de ambos grupos de tres pares de cavidades
celómicas con sus tres zonas corporales correspondientes. Los deuteróstomos
adultos se han modificado mucho. Los gusanos planos están equipados para flotar
y nadar, los equinodermos han perdido su simetría bilateral y han recuperado la
simetría radial (a menudo de cinco radios, como en la mayoría de las estrellas
de mar). Los hemicordados de tipo vermicular tienen una estructura muy simple,
y dentro del linaje de los cordados se han desarrollado características más
evolucionadas, como un cerebro complejo y una locomoción rápida.
A continuación se expone
un breve resumen de los filos que se agrupan en alguno de los apartados mayores
que ya hemos comentado. Hay más información en artículos que reciben el nombre
común del filo o superfilo. El número de especies conocidas es aproximado y no
incluye las especies fósiles.
PRINCIPALES
SUBDIVISIÓN DEL REINO ANIMAL
Los filos constituyen
la mayor categoría taxonómica del reino
animal y en ellos se agrupan animales que tienen un diseño u organización
similar. Sin embargo, y de un modo informal, estos filos se reúnen en otras
categorías superiores en base a características anatómicas y embriológicas como
la simetría o las cavidades internas. Los filos animales se suelen agrupar en
tres ramas: mesozoos, parazoos y eumetazoos. Las dos primeras ramas están
formadas por organismos con un nivel de organización más sencillo, mientras que
la rama eumetazoos agrupa animales con un nivel tisular de organización o con
sistemas de órganos.
MEZOZOOS
Esta división comprende
un único filo. Se les dio el nombre mesozoos, que significa animales
intermedios, porque se pensaba que eran un grupo intermedio entre los protozoos
y los metazoos, aunque en la actualidad esta teoría no está muy clara; 50 especies.
FILO MESOZOOS: son animales
pequeños de aspecto vermiforme que viven como parásitos de invertebrados
marinos. Están formados por una capa externa de células que rodea a otra
interna de células reproductoras. Hay dos clases de mesozoos (rombozoos y
ortonéctidos) aunque algunos autores consideran que estas dos clases deberían
situarse en dos filos distintos.
PARAZOOS
Esta división incluye
dos filos: el filo placozoos y el filo poríferos.
FILO PLACOZOOS: este filo
incluye una única especie: trichoplax adhaerens. Se trata de un animal
marino de 2 o 3 mm de diámetro. Está formado por dos capas epiteliales
entre las cuales hay una cavidad que contiene fluidos y células fibrosas.
FILO PORÍFEROS: este filo
está formado por las esponjas, animales simples, multicelulares, con células
especializadas pero que no se agrupan en verdaderos tejidos. La mayoría son
marinas, aunque algunas se encuentran en aguas dulces. Están fijas sobre un
substrato y se alimentan haciendo pasar agua a su interior a través de poros; allí,
sus células flageladas toman las partículas de alimento. La mayor parte de las
funciones corporales las realizan células que actúan independientemente o en
pequeños grupos. Carecen de sistema nervioso, pero reaccionan a estímulos.
Tienen un esqueleto formado sólo por espongina (un material proteínico
flexible), por espículas calcáreas o silíceas, o bien por ambas cosas; 5.000
especies.
LOA ANIMALES RADIADOS
Animales con simetría
radial (excepto cuando sufren modificaciones secundarias) y un cuerpo con dos
capas celulares: endodermo y ectodermo. Incluye los filos cnidarios y
ctenóforos.
FILO CNIDARIOS O CELENTÉREOS: a este filo
pertenecen las verdaderas medusas, los hidroides, los corales y las anémonas
marinas. Los estados de vida de los cnidarios incluyen un pólipo fijo (como en
las anémonas marinas), una forma libre (como en las medusas), o ambas. La presa
es atrapada por medio de células urticantes localizadas generalmente en los
tentáculos. Estos animales son marinos con excepción de algunas formas de agua
dulce, como la hidra; 4 clases y 9.000 especies.
FILO CTENÓFOROS: estos animales
marinos se parecen a las medusas verdaderas pero carecen de forma polipoide y
nadan utilizando bandas de células ciliadas que recuerdan a crestas. La presa
es atrapada por tentáculos adherentes; 50 especies.
LOS ANIMALES
ACELOMADOS
Comprende animales con
simetría bilateral, protóstomos y sin celoma.
FILO PLATELMINTOS: este filo está
formado por los gusanos planos, que no tienen ano ni aparato circulatorio y son
estructuralmente simples. Son casi todos hermafroditas, y su aparato
reproductor es con frecuencia muy complejo. Gracias a su forma plana presentan
los tejidos próximos a la superficie, lo que facilita el intercambio de gases y
nutrientes con el medio. La clase turbelarios, que incluye animales de vida
libre, es abundante en el mar y en el agua dulce y es rara en la tierra. Las
otras 3 clases son parasitarias: trematodos (duelas), monogeneos (duelas
monogenéticas) y cestodos (tenias); 13.000 especies.
FILO NEMERTINOS O RINCOCELOS: este filo incluye
los gusanos cintiformes, de forma alargada, que poseen un aparato circulatorio
y un ano. La mayoría viven en el mar, aunque también hay formas terrestres.
Presentan una probóscide que extienden para capturar a las presas; 650
especies.
FILO GNATOSTOMÚLIDOS: los gnatostomúlidos
o gusanos con mandíbula son animales pequeños, de entre 0.5 y 1 mm de
longitud; 80 especies.
Los animales
pseudoceloma
Animales vermiculares
entre microscópicos y pequeños cuya cavidad corporal es un pseudoceloma;
carecen de aparato circulatorio. Hay 9 filos de animales pseudocelomados que se
incluyen en la división protóstomos de los eumetazoos con simetría bilateral.
Constituyen un grupo polifilético (que no deriva de un antecesor común) muy heterogéneo.
Los filos rotíferos, gastrotricos,
kinorrincos, nematodos y nematomorfos presentan algunas características
comunes, por lo que algunos autores los han agrupado en un superfilo denominado
asquelmintos.
FILO NEMATODOS: comprende
gusanos alargados de forma cilíndrica con una cubierta dura denominada cutícula
y una forma corporal mantenida por la presión de un fluido. Se alimentan
generalmente por aspiración de líquidos, o ingesta de partículas pequeñas o
materiales blandos. Son abundantes y viven en el suelo, y en sedimentos marinos
y de agua dulce. Algunos son parásitos y causantes de enfermedades graves;
12.000 especies.
FILO GASTROTRICOS: son gusanos
marinos y de agua dulce, pequeños (inferiores a 1 mm de longitud) y de
cuerpo corto; 400 especies.
FILO NEMATOMORFOS: reciben el
nombre común de gusanos crin de caballos; son gusanos extremadamente largos y
delgados. Son parásitos de artrópodos en su forma larvaria y en su forma adulta
son libres y acuáticos; 250 especies.
FILO ACANTOCÉFALOS: reciben el nombre
común de gusanos de cabeza espinosa y son parásitos del intestino de los
vertebrados en su forma adulta y de los tejidos de diversos animales en su
forma larvaria. Carecen de intestino y poseen una probóscide espinosa con la
que se fijan al intestino del hospedador. Son parecidos a las tenias; 500
especies.
FILO KINORRINCOS: son gusanos
marinos pequeños y espinosos (menos de 1 mm de longitud); su cuerpo es
corto y está dividido en 13 segmentos. la cabeza consta de una probóscide
retráctil; 175 especies.
FILO ROTÍFEROS: los miembros
de este filo, los rotíferos, deben su nombre a un aparato con apariencia de
rueda que portan sobre la cabeza y que utilizan para alimentarse y nadar. Con
frecuencia son microscópicos y abundan en aguas dulces; 1.500 especies.
FILO PRIAPÚLIDOS: son gusanos
marinos de vida libre. El cuerpo consta de una probóscide, un tronco cubierto
de espinas y uno o dos apéndices caudales; 15 especies.
FILO ENDOPROCTOS: son animales
sésiles, pedunculados y muy pequeños. Casi todos son formas marinas que se
alimentan mediante tentáculos; 150 especies.
FILO LORICÍFEROS: este filo,
establecido en 1983, está constituido por organismos de sólo 0,5 mm de
longitud que viven en el sedimento marino. las larvas son flotantes y los
adultos sedentarios. Tienen bocas cónicas que pueden retraerse hacia una cabeza
de espinas, a su vez retráctil.
CELOMADOS:
PRETOSTAMOS
Incluye aquellos eumetazoos
protóstomos con simetría bilateral que tienen verdadero celoma. Algunos autores
reúnen a los filos sipuncúlidos, equiúridos, anélidos y moluscos en un grupo
denominado trocozoos debido a la presencia en todos ellos de una larva
trocófora.
FILO SIPUNCÚLIDOS: son gusanos
marinos de tamaño medio (unos 3 cm de longitud) que tienen un cuerpo en
forma de saco y una probóscide; 330 especies.
FILO EQUIÚRIDOS: son animales
marinos de aspecto vermiforme. Tienen una probóscide que utilizan para excavar
y obtener alimento; 140 especies.
FILO POGONÓFOROS: este filo está
formado por animales marinos con forma de gusano que viven en tubos enterrados
en el sedimento marino; 145 especies.
FILO PENTASTÓMIDOS: reciben el
nombre común de gusanos lengua y son animales parásitos del aparato
respiratorio de vertebrados; 90 especies.
FILO ONICÓFOROS: en este
filo se incluyen los denominados comúnmente gusanos de terciopelo; son animales
con aspecto de oruga que viven en ambientes terrestres aunque en zonas húmedas;
70 especies.
FILO TARDÍGRADOS: son animales de
pequeño tamaño, de menos de 1 mm de longitud. La mayor parte de las
especies son terrestres aunque también hay tardígrados marinos y
dulceacuícolas; 400 especies.
FILO ANÉLIDOS: los miembros
del filo anélidos tienen un celoma bien desarrollado, un cuerpo blando, y (como
norma) una segmentación muy evolucionada. Poseen unas estructuras en forma de
púas o cerdas (quetas) que utilizan para deslizarse. Este grupo incluye a las
lombrices de tierra (clase oligoquetos), las sanguijuelas (clase hirudíneos) y
la clase menos conocida, los gusanos con cerdas (clase poliquetos); 14.000
especies.
FILO MOLUSCOS: es uno de los
filos animales con mayor número de especies e incluye a los caracoles y a las
almejas, entre otros. Los moluscos presentan una concha dura y un cuerpo
blando. Se observa un cierto vestigio de metamerismo, y el celoma es pequeño.
La cavidad corporal principal es parte del aparato circulatorio. Algunas
formas, como los pulpos y los calamares, alcanzan un tamaño considerable. Las
ocho clases de moluscos son: caudofoveados, solenogastros, poliplacóforos
(quitones), monoplacóforos, escafópodos (conchas colmillos o dentalios),
gasterópodos (caracoles y babosas), bivalvos (almejas y otros) y cefalópodos
(pulpos, calamares y otros); 50.000 especies.
FILO ARTRÓPODOS: el cuerpo de un
artrópodo está cubierto por un esqueleto duro articulado. Es el filo animal más
grande a causa del gran número de insectos que existen. Los artrópodos abundan
y son capaces de sobrevivir en casi todos los hábitats. El cuerpo está
segmentado y el celoma se ha reducido. Las clases del filo artrópodos pueden
agruparse en subfilos: subfilo trilobites, subfilo quelicerados (que tienen el
primer par de apéndices modificados en quelíceros), subfilo crustáceos y
subfilo unirrámeos (insectos y miriápodos). Más de 1.000.000 de especies.
CELOMADOS:
DEUTEROSTOMOS
A este gran grupo pertenecen
el resto de los animales que se caracterizan porque la boca se origina
secundariamente como una nueva formación durante el desarrollo embrionario. Son
todos eucelomados. Los filos foronídeos, ectoproctos y braquiópodos se agrupan
en un superfilo llamado lofoforados o tentaculados ya que todos ellos poseen
una corona de tentáculos denominada lofóforo que utilizan para alimentarse.
FILO FORONÍDEOS: los miembros
de este filo tienen el intestino en forma de u debido a que su cuerpo es muy
alargado. Viven en tubos en los que el lofóforo y el ano se localizan en un
extremo. Las formas adultas miden entre 1 y 10 cm y son todas marinas; 10
especies.
FILO ECTOPROCTOS O BRIOZOOS: los miembros de este
filo, ectoproctos, polizoos o briozoos verdaderos, son animales pequeños,
coloniales, y recuerdan a foronídeos simplificados. Son principalmente marinos,
y viven en el interior de una cubierta dura; 4.000 especies.
FILO BRAQUIÓPODOS: estos animales
se parecen a las almejas pero tienen conchas superior e inferior en vez de
derecha e izquierda. Todos son marinos; 325 especies.
FILO QUETOGNATOS: este filo
comprende a las saetas, animales pequeños, activos, exclusivamente marinos y de
relaciones desconocidas; 70 especies.
FILO EQUINODERMOS: los
equinodermos incluyen a las estrellas de mar y a los cohombros de mar, entre
otros. Tienen una locomoción lenta que depende principalmente de unas pequeñas
estructuras denominadas pies ambulacrales. Todos son animales marinos. Las seis
clases que existen son: crinoideos (lirios de mar), asteroideos (estrellas de
mar), ofiuroideos (ofiuras), equinoideos (erizos de mar y dólares de arena),
holoturioideos (cohombros de mar) y concentricicloideos (margaritas de mar);
6.000 especies.
FILO HEMICORDADOS: estos animales
marinos vermiculados presentan algunas características que los relacionan con
los cordados. Entre ellas está el resto de lo que pudo ser una notocorda (ver
el apartado siguiente relativo al filo cordados), un cordón nervioso dorsal, y
un sistema de hendiduras branquiales. Sin embargo, la forma larval de los
gusanos los vincula con los equinodermos; 85 especies.
FILO CORDADOS: el filo
cordados incluye a los vertebrados (animales con columna vertebral) y a algunos
invertebrados emparentados con ellos. En algún momento de su vida, todos poseen
un cilindro rígido, denominado notocorda, de posición dorsal al intestino. En
los vertebrados la notocorda está reemplazada por una serie de huesos
(vértebras).
Existen dos subfilos de
cordados invertebrados. La forma adulta del subfilo tunicado está muy
modificada y se fija a un sustrato. Se alimentan a través de las hendiduras
branquiales. La notocorda sólo se conserva en la larva de vida libre. Todos son
animales marinos, y existen cerca de 3.000 especies. Los miembros del subfilo cefalocordados
(lancetas) se parecen a peces muy simples. Viven en el mar. Obtienen el
alimento del agua cuando ésta pasa a través de sus hendiduras branquiales. Hay
unas 25 especies.
El resto de los cordados pertenece al subfilo
vertebrado y se caracterizan por presentar una columna vertebral. Aunque el
grupo es muy numeroso (cuenta con unas 50.000 especies), es superado
ampliamente por los artrópodos. Por lo general, se reconocen siete clases. La
clase original peces se repartió, hace tiempo, en cuatro clases: mixines
(mixines), cefalaspidomorfos (lampreas), condrictios (peces cartilaginosos como
los tiburones y las rayas) y osteíctios (peces óseos). La clase anfibios
comprende animales semiacuáticos como las salamandras, los sapos y las ranas.
La clase reptiles está mejor adaptada a la vida sobre la tierra e incluye
tortugas, lagartos y cocodrilos. La clase aves destaca no sólo por su capacidad
para volar, sino también por su sangre caliente y su cubierta de plumas
aislante. La clase de los mamíferos se caracteriza por la presencia de pelo y
de glándulas mamarias que secretan leche. Este grupo es también de sangre
caliente